TENTADERO EN OSBORNE
ALUMNOS DE LA ESCUELA TAURINA DE CÓRDOBA DISFRUTAN TOREANDO GANADO DE MUCHÍSIMA CALIDAD
Ladislao
Rodríguez Galán fotos: Ladis
Ocho alumnos de la Escuela Taurina de
Córdoba, junto al director "Chiquilín", el profesor "El
Califa" y el que suscribe, vivimos una jornada de ensueño en la finca Dehesa
Puerto Acebuche, del término municipal de Castillo de las Guardas, donde pastan
las reses de Osborne, los característicos toros ensabanados.
El tentadero fue una gentileza del
empresario de Córdoba José María Garzón para con los chavales cordobeses y
ninguno defraudó, brillando todos a gran altura, gracias, justo es decirlo, al extraordinario
juego bravo y noble de las tres vacas
que se soltaron.
La expedición estuvo compuesta por David
Fuentes "Bocanegra", Manuel Román, Andrés Membrives, Marta Martín,
"Joselito de Córdoba", Manuel Quintana, Antonio Cañero y Manuel
Fernández ( este último la segunda vez que se ponía delante de ganado bravo).
ALUMNOS DE LA ESCUELA DE CÓRDOBA ASISTENTES AL TENTADERO
EL ESPONTÁNEO
No faltó tampoco, en la última vaca y cuando ya estaba a punto de ser retirada, la irrupción en el ruedo de "El Califa", un espontáneo de lujo que no se pudo contener ante material tan exquisito, estirándose en varios muletazos demostrando que quien tuvo retuvo.
EL PICADOR
Las vacas, que repitieron con alegría sus
entradas al caballo, fueron picadas por el joven Francisco García Hidalgo,
mayoral de la ganadería, haciéndolo muy requetebién agarrándose arriba cada vez
que los animales volvían a entrar al caballo, para alegría del ganadero que
desde un burladero tomaba nota de todo cuanto acontecía.
A la caída de la tarde, cuando regresábamos
por el carril en busca de la carretera, pudimos observar la bella estampa de
los ejemplares ensabanados que contrastaban con el verde de la dehesa. Íbamos muy complacidos por el buen trato recibido.
Como curiosidad añadir que, según nos explicó el ganadero, la silueta tan familiar del
toro está presente en 90 puntos de las
diferentes carreteras españolas sin el nombre de Osborne y que en México está presente
en dos carreteras y en una de Japón. En ambos países luciendo el nombre de la
casa.
Está demostrado que el toro bravo, ya sea real o como soporte publicitario, es un animal diferente y único al que se rinde el mundo entero
LA CÁMARA ESTABA ALLÍ
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