martes, 30 de noviembre de 2021

lunes, 29 de noviembre de 2021

 

I CONCURSO FOTOGRÁFICO LA FUENSECA

LOS GANADORES RECOGEN SUS PREMIOS EN UN ACTO EN EL QUE SE RECORDÓ AL ENTRAÑABLE EMILIO ÁLVAREZ

Ladislao Rodríguez Galán                               fotos: Ladis

La Taberna La Fuenseca (fundada por Juan Rodríguez) hace 180 años y una institución en Córdoba, convocó el I Concurso Fotográfico La Fuenseca que contó con una participación de 90 autores que presentaron un total de 110 obras.

El tema de esta convocatoria era estrictamente la Taberna La Fuenseca y sus gentes. Se trataba de mostrar una visión distinta (según cada autor) de este Santuario cordobés.

Una vez abiertas las plicas los ganadores fueron: Primer Premio para Miguel Moreno Linares y Segundo Premio para Manuel Martín Cobos.


En el apartado de Jóvenes Promesas el premio recayó en las hermanas Valentina y Vera.

El director de la Exposición, montada con las 20 obras finalistas, es Bartolomé Lebrón y la idea de crear este certamen fotográfico corresponde a María Villaltoro.
La muestra  estará abierta al público hasta el día 16 de diciembre, en horario de mañana y tarde.


Como saben la Taberna La Fuenseca tomó un nuevo aire en el  año 1980 cuando se hizo cargo de ella el recordado y añorado Emilio Álvarez que acogió en este maravilloso rincón a la sede de la Peña Flamenca "Merengue de Córdoba" y de la Tertulia Taurina "Manolete" y sobre todo lugar de encuentro de artistas como pintores y escritores.

El cariño de este hombre por su Taberna, le llevó a transmitir a su nieto Jesús Alamillo, esa pasión y desde que desapareció es este joven inquieto de carácter abierto quien dirige los destinos de esta histórica Taberna.


 
TABERNA LA FUENSECA 











viernes, 26 de noviembre de 2021

 

MAGISTRAL MANO A MANO ENTRE JOSÉ MARÍA MONTILLA Y LUIS PARRA "JEREZANO"

texto: Rafael Comino                          fotos: Ladis y archivo

Días pasados se dieron cita en el Ateneo literario, artístico y científico de Cádiz, los diestros José María Montilla y Luis Parra, Jerezano, en un mano a mano, para debatir y rememorar la década de los años sesenta en el toreo, época en que ellos estaban en el cenit de sus carreras como toreros. El acto estuvo presidido por el presidente del Ateneo don Jose Almenara Barrios, coordinado por quien esto escribe y moderado por don Luis Rivas, informador taurino de Cádiz.

Hemos de destacar un momento de gran emotividad cuando, en la "puerta de cuadrillas", ambos diestros se encontraron, despues de casi sesenta años, pues no se habían visto desde la última vez que torearon juntos, siendo aún novilleros los dos.

Con tres cuartos de entrada, es decir con el salón casi lleno se celebró dicho acto, en el que ambos maestros entusiasmaron a los asistentes recordando sus vivencias de aquellos años, tan distintos para el toreo a los que ahora vivimos. Con nostalgia, y a veces con emoción, nos recordaron los toreros más destacados de aquella época

Hemos de destacar un momento de gran emotividad cuando, en la “puerta de cuadrillas”, ambos diestros se encontraron, después de casi sesenta años, pues no se habían visto desde la última vez que torearon juntos, siendo aún novilleros los dos.

Con tres cuartos de entrada, es decir, con el salón casi lleno se celebró dicho acto, en el que ambos maestros entusiasmaron a los asistentes recordando sus vivencias de aquellos años, tan distintos para el toreo a los que ahora vivimos. Con nostalgia, y a veces con emoción, nos recordaron los toreros más destacados de aquella década, sus características y diferencias con las figuras de hoy en día, así como las diferencias, muy notables, entre los toros que salían entonces (con menos kilos pero más encastados) y los de ahora (con demasiados kilos, pero también con embestidas demasiado dulzonas a veces). 

Ambos estuvieron de acuerdo en que la labor de los ganaderos seleccionando bravura, nobleza y calidad en la embestida ha sido ingente a lo largo de los tiempos, hasta el punto de que ahora sale el toro casi perfecto, pero salvo excepciones, trasmite poca emoción a los tendidos, precisamente por ser excesivamente pastueños y previsibles.

 Si bien hay alguna ganadería, como Fuente Ymbro (cuyo propietario Ricardo Gallardo, nos honró con su presencia) que se sale de esa monotonía, y echa el toro más encastado, enrazado y enclasado, probablemente, de toda la cabaña brava en la actualidad.

 

A la hora de hacer un cartel ideal de aquella década, el maestro Montilla propuso a Antonio Ordoñez, Paco Camino y Manuel Benítez "El Cordobés" y Jerezano a Antonio Ordoñez Paco Camino y Rafael de Paula. Ciertamente hoy en día con ambos carteles se pondría el “no hay billetes” en cualquier plaza.



Antes de finalizar el mano a mano se dio la palabra a los asistentes que formularon múltiples preguntas a los dos matadores, quienes, podemos decir, que salieron por la “puerta grande.

 


 

 

 

 

lunes, 22 de noviembre de 2021

 

DOMINGO ECHEVARRÍA PRESENTA SU LIBRO HOMENAJE A "CALERITO"

EL ACTO, QUE CONTÓ CON GRAN ASISTENCIA DE PÚBLICO, ESTUVO ARROPADO POR TOREROS, ESCRITORES Y ARTISTAS.

 
Ladislao Rodríguez Galán                           fotos: Ladis

 Aunque estaba previsto presentar este libro el año 2020 que se cumplía el sesenta aniversario del fallecimiento del torero Manuel Calero Cantero "Calerito",  la pandemia impidió que se llevara a cabo.

Ahora que parece que el viento ha cambiado ( de momento) la tarde noche del lunes 22 de noviembre ha tenido lugar en el Salón de Actos de la Diputación de Córdoba la puesta de largo de esta ambiciosa obra, fruto de un trabajo intenso de recopilación de datos y fotografías del malogrado diestro por parte del autor Domingo Echevarría.

El escritor y poeta  se ha dejado la piel en este homenaje literario a uno de los toreros más serios y elegantes de nuestra tierra que despertó desde sus inicios una gran expectación entre los aficionados.

A la hora del comienzo del acto, el Salón presentaba el lleno permitido por las autoridades sanitarias.

Se dieron cita toreros como José María Montilla, Agustín Castellano "El Puri", Fernando Tortosa, Juan Antonio Cobos "El Garbanzo", Antonio Sánchez Saco "El Tato" y Antonio Tejero, escritores como Carlos Valverde, Juan Serrano y José Mª Portillo y miembros de numerosas peñas taurinas. Una delicia ver  esta excelente respuesta a la convocatoria.

El acto comenzó con unas palabras de bienvenida del presidente del Club Calerito Juan de Dios Martínez que dijo sentirse muy feliz por poder presentar esta obra literaria de primer orden dedicada al titular del Club, que sigue fiel a la memoria del torero de Villaviciosa de Córdoba.

Le sucedieron en el uso de la palabra varios oradores hasta que llegó el turno del autor. Domingo Echevarría, hombre sencillo y discreto, que agradeció a todos su presencia y sobre todo  a la Diputación su sensibilidad con el mundo del toro al editar esta obra ( de reparto gratuito) que recoge la vida y obra de un torero que murió joven víctima de una cruel enfermedad.

Domingo Echevarría detalló lo complicado que ha sido reunir datos y fotos de "Calerito", pero que todo lo da por bueno al ver el resultado de esta obra de consulta que muestra la personalidad de este gran torero.

Indicó que han sido muchas horas y muchos viajes cruzando nuestra provincia y otras limítrofes para poder homenajear con la pluma a "Calerito", una ilusión que acariciaba desde siempre.

"Estoy seguro-dijo- que disfrutaran el libro lo mismo que yo he disfrutado escribiéndolo".

El libro, que el autor ha dedicado a varias personas de su entono, cuenta con el prólogo del presidente de la Diputación Antonio Ruiz y un artículo firmado por el decano de los toreros cordobeses José María Montilla Álvarez.

Antes de proceder al reparto del volumen a los asistentes, intervinieron los cantaores Curro Díaz y Gema Cumplido acompañados a  la guitarra por Rafael Trenas.

Cartel netamente cordobés para unirse al homenaje de un torero de la tierra.

LA CÁMARA ESTABA ALLÍ










viernes, 19 de noviembre de 2021

 

TENTADERO EN BLANCO DE TORRES

SE TENTARON TRECE VACAS Y SEIS MACHOS QUE DIERON UN JUEGO EXTRAORDINARIO

AL ÉXITO GANADERO CONTRIBUYERON LOS TOREROS QUE SUPIERON LUCIR AL GANADO

 

Ladislao Rodríguez Galán                     fotos: Ladis                             

Jornada maratoniana la vivida en la finca "Majada la Sierra" situada en Santa Eufemia donde pastan las reses de la ganadería Blanco de Torres.

Desde primeras horas de la mañana de un día precioso, fresco pero sin agobios, el ganadero Juan Manuel Blanco y su esposa Manuela de Torres, fueron recibiendo a los toreros y a los escogidos invitados.

 

Para el tentadero se contó con los matadores de toros Víctor Puerto, Alberto Lamelas y Fernando Rey.




y los novilleros Alejandro Peñaranda (con picadores), "Joselito de Córdoba", de la escuela Taurina de Córdoba y José Antonio de Gracia, de la Escuela Taurina de Badajoz.




Para dar comienzo al tentadero se fijó las diez de la mañana ya que había tajo por delante. Y a esa hora todo el mundo ya estaba instalado en sus puestos para iniciar una jornada larga, pero que se hizo amena y agradable por el buen juego del ganado y el buen hacer de los toreros. Todos sin distinción.

En el palco las señoras y distribuidos por los diferentes burladeros los toreros y entre ellos  Antonio Tejero, que como saben es apoderado de Alberto Lamelas.

Se tentaron trece vacas y seis machos (cuatro toros y dos erales) que dieron en conjunto un juego extraordinario destacando dos toros y varias vacas que no se cansaban de embestir con clase y nobleza.



Destacar que todos acudieron al caballo desde las distancias fijadas para tentar y lo hicieron con galope alegre y pelearon con el caballo con raza y fuerza, mostrando en toda su dimensión el encaste Santa Coloma, refrescado con Buendía que es la base de esta ganadería.

Por su parte los  picadores David Prados y Cristian Romero supieron dosificar el castigo haciendo de esta suerte un gran espectáculo.

Con la experiencia propia en las tareas de tienta, los matadores de toros fueron recibiendo a las reses y después de lucirlas en la muleta, las fueron cediendo a los novilleros que se hartaron de torear disfrutando de un material tan óptimo.



Una tras otra fueron saltando al ruedo de la coqueta plaza de tientas y en la mayoría de los casos había que cortar las  interesantes faenas porque las horas seguían avanzando y en los chiqueros quedaba material.

Sobre las tres de la tarde se hizo un inciso para tomar un tentempié (todos los platos con ibérico de la zona). Cosa natural encontrándonos en el corazón del Valle de Los Pedroches.

Recuperadas fuerzas y entonación, todos de nuevo a sus puestos para continuar con la tarea.

Los seis machos se tentaron seguidos y a continuación el turno de las hembras y cuando saltó al ruedo la última, el sol nos hacía guiños entre unas nubes esperanzadoras que comenzaron a cubrir el cielo azul que había primado durante todo el día.


Sobre las seis y algo de la tarde, se encerró esta postrer vaca y  el horizonte se mostraba encendido con los reflejos del sol que se resistía a abandonar esta privilegiada finca enclavada entre encinares.


Parabienes al ganadero y toreros, y todos a compartir una comida que puso broche de oro a una jornada larga pero magnífica, donde el estilo del matrimonio ganadero quedó patente en el exquisito trato dispensado a todos los que estuvimos en el tentadero.



  LA CÁMARA ESTABA ALLÍ