ENTREVISTA
"EN
ARACENA HICE MI PRIMER PASEÍLLO Y AL CORTAR LAS DOS OREJAS ME SENTÍ EN EL
PARAÍSO"
"EN
LA ESCUELA DEL MAESTRO RUIZ MIGUEL ESTOY APRENDIENDO MUCHO"
MIRIAN CABAS ESTA MUY ILUSIONADA EN SEGUIR AVANZANDO TRAS SU ÉXITO EN ARACENA
texto: Ladislao Rodríguez Galán fotos: Ladis
El abuelo fue un aficionado de parilla. Lo que siempre se ha denominado maletilla. Visitaba las ganaderías y mataba el gusanillo cuando podía dar o tres pases. Por esta afición en la casa siempre se ha hablado de toros y la pequeña Mirian Cabas jugaba con capotes y muletas e infinidad de veces toreaba con un paño de cocina.
Viendo las aptitudes de la
pequeña el abuelo la apuntó a la Escuela Taurina de Algeciras (ellos vivían en
Los Barrios). Así que con cinco años recién cumplidos pisó por primera vez el
albero de una plaza de toros. Como es natural iba a la Escuela a jugar, pues
con esa edad no podía entender lo que allí se enseñaba. Pero los días de clase
no faltaba ni uno. Cada día le gustaba más el mundo del toro. Hasta que el
pasado día 24 de julio debuta ante el público vestida de luces en la plaza de
Aracena, participando en la cuarta selección de las Escuelas Taurinas de
Andalucía.
- Me
puede explicar la sensación que sintió?.
- Perfectamente. Yo nunca había toreado en
una plaza de toros, ni de corto ni nada. La tarde de Aracena significó para mí
un paso adelante tremendo. Era una gran responsabilidad porque en la Escuela
confiaron en mí para representarlos en esta edición de las novilladas andaluzas.
Al hacer el paseíllo entre aplausos de los tendidos ya me sentí flotar.
- ¿Y
luego cuando paseó las dos orejas de su novillo?.
- Fue una sensación de
felicidad enorme pues se había cumplido mi sueño principal. Fue un día
emocionante pues el balance fue muy positivo. Al cortar las dos orejas y dar la
vuelta al ruedo me sentí en el paraiso.
- Cuando cumplo siete años vamos a un tentadero a la ganadería de Mari Carmen Camacho y el diestro Octavio Chacón me invita a torear una becerra. Se puso detrás de mí y me ayudó a sostener la muleta. La becerra pasó dos veces y esa sensación no la olvidaré nunca. Ahí me di cuenta que quería ser torera por encima de todo. Después repetí experiencia en la ganadería de Cebada Gago, teniendo yo nueve años. Volví a sentirme satisfecha y eso acrecentó mi afición.
- Y
ahora tres este triunfo incontestable ¿Qué proyectos tiene?.
- De momento seguir preparándome en la
Escuela del maestro Ruiz Miguel, donde estoy aprendiendo mucho y esperar que el
jurado considere que debo pasar a la segunda fase del certamen y, después, el
día 24 de agosto toreo en el Puerto de Santa María.
- Me dijo que no le importaba, porque se
creía que era un juego pasajero de niñas, pero luego se ha dado cuenta que es
un deseo irrefrenable y ya no le gusta tanto, porque pasa malos ratos.
- ¿Entonces
no vería la novillada de su debut y posterior triunfo por Canal Sur TV?
- Exactamente, la
vimos después las dos juntas y ya estaba tranquila porque me tenía a su lado.
Nunca ha venido a ningún tentadero. Y menos mal porque me han dado volteretas
tremendas y lo hubiera pasado fatal. Me gustaría que esté una vez en la plaza
para poder brindarle una faena. Espero que algún día se decida y me vea sentada
en el tendido.
- Me vi bien y muy capaz, con los lógicos
fallos de principiante. En el mundo del toro nunca se acaba de aprender, pero
ese es un camino ilusionante que tengo por delante. Y le aseguro que por mí no
va a quedar.