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HACE SESENTA AÑOS QUE MANUEL BENÍTEZ "EL CORDOBÉS" SE COMPRÓ UN AVION

Ladislao Rodríguez Galán                             fotos: Ladis

Era tal el trasiego y kilómetros sin poder descansar para cumplir sus numerosos compromisos profesionales que Manuel decide comprarse un avión que le simplifique los desplazamientos al cruzar la península de una esquina a otra.

Y el 11 de Abril de 1965, en las pistas del aeropuerto de Córdoba, el padre Arroyo, coadjutor de la parroquia de Santa Marina, bendice y bautiza el avión Piper Aztec con el nombre de "El Cordobés" ante la asistencia de un reducido grupo de periodistas y amigos del torero.

Hasta que el 20 de Agosto de 1969  alcanzó su sueño de obtener el carnet de piloto, Manuel Benítez tenía contratado un piloto profesional que lo transportaba de acá para allá.

 A partir de ese momento surcaba los aires a los mandos de su Piper. Y muchas veces tuvo que pilotar vestido de torero porque el tiempo apremiaba y salía así de su finca.

Manuel había mandado construir, en la parte baja de Villalobillos, una pista de aterrizaje, y por ella entraba y salía con su avión como el que entra a la cochera de su casa.

Con esta nueva genialidad “El Cordobés” encontró algo de paz y tranquilidad en su ajetreada vida profesional.

Hay que recordar que en 1965 alcanzó el récord de torear 111 corridas de toros. Récord que logró superar en 170 al alcanzar las 121 corridas de toros.

Fíjense lo que es el sino de las personas: de pasar calamidades al quedar huérfano de padres, con apenas dos años, y no tener zapatos que ponerse, a disponer de avión propio.