78 AÑOS DE UN ARCHIVO SORPRENDENTE
ESTE AÑO SE HAN CUMPLIDO 68 AÑOS DE LA
MUERTE DEL PICADOR DE TOROS CORDOBÉS “EL TIGRE”
VALERIO MERINO “EL TIGRE” FALLECIO COMO
CONSECUENCIA DE CAERSE DEL CABALLO CUANDO PICABA AL TERCER NOVILLO DE LA TARDE.
Ladislao Rodríguez Galán fotos
exclusivas: Ladis
Infinidad de veces, rebuscando en nuestro archivo,
encuentro fotografías de tremenda carga histórica. Esta mañana me he topado con
un documento gráfico de gran calibre, obtenido por mi querido padre Ladis, que
como es conocido era un artista de la cámara, especializado en el tema taurino y
un fotoperiodista de lujo.
En los años cincuenta y sesenta, del siglo pasado,
en la añorada plaza de Los Tejares se daban multitud de novilladas de promoción
para que los chavales se curtieran en este duro oficio. El público asistía y el
empresario de turno se animaba a seguir con los espectáculos.
La tarde del domingo
15 de abril de 1956 en la plaza de toros de Los Tejares se anunciaba una
novillada para Manuel Ávila, Juan Jiménez “El Trianero” y el cordobés Manuel Cadenas
Torres, que lidiarían novillos de Fermín Díaz “Tres Gallos”.
Hasta ahí todo bien, la plaza registraba una entrada
aceptable, con sombra casi llena y sol ocupado en buena parte.
El festejo se desarrollaba sin novedad hasta que
salió al ruedo el tercer novillo. Manuel Cadenas lo recibe a la verónica y tras
unos buenos lances de recibo el presidente ordena el cambio de tercio.
Por turno le corresponde picar al varilarguero cordobés Valerio Merino Ramírez “El Tigre”. Se agarra bien pero el burel aprieta hasta que derriba al caballo.
Entonces se produce la desgracia. “El Tigre” ( de 27 años) cae al albero y se le desprende el castoreño (sombrero que como ustedes saben va sujeto fuertemente por el barbuquejo y amortigua el golpe protegiendo la cabeza). El golpe con el suelo es tan duro que le produce la rotura del cráneo. Llevado inmediatamente a la enfermería, el jefe de la misma, el eminente doctor Antonio Ortiz Clot, ante la gravísima situación, ordena que venga un sacerdote y le de la extremaunción.Trasladado al hospital recibió los cuidados
necesarios pero lamentablemente falleció el lunes día 16.
Su fallecimiento causó en Córdoba gran pesar pues
Valerio era un joven muy simpático y tenía muchos conocidos por que trabajaba
en una compañía eléctrica.
Este año, en el mes de abril, se conmemoró el 68
aniversario de aquella fatídica tarde.
Descanse en paz.
Qué así sea.
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