LA
OPINIÓN DE LA AFICIÓN
SALVADOR
ROMERO VENEGAS
PRESIDENTE
AGRUPACIÓN FOTOGRÁFICA DE UBRIQUE
Ladislao
Rodríguez Galán
No hay mejor ilusión que hacer las cosas
por cariño y afición. Salvador Romero es un Ubriqueño que cuando tuvo su
primera cámara fotográfica, con quince años, quedó enganchado de la magia de la
fotografía.
Estudió, practicó e investigó y logró dominar la técnica de la
fotografía química (ahora, sin quitar mérito a nadie, todo o casi, lo hace la
cámara inteligente que te venden en los comercios).
A base de muchas horas de
laboratorio y de mucho celuloide gastado consiguió superarse a sí mismo con el
consiguiente resultado de estar cualificado para valorar técnicamente su propio trabajo.
Salvador domina la fotografía artística con
una técnica y calidad muy depurada. Sus fotografías hablan por sí solas y todas
te transmiten un mensaje. Ya se sabe que el arte y mérito de la fotografía es comunicar con la imagen.
Otra vertiente querida por Salvador es la taurina. Su padre comenzó a
llevarlo a los toros allá por los años cincuenta cuando mandaban en el toreo
"Litri", Ordóñez, Jaime Ostos... y cuando apareció "El
Cordobés" ( año 1960) la revolución que significó no dejó indiferente a
este niño ni a su padre.
Como es natural tantos festejos
presenciados, hicieron mella en el chico y en cuanto que tuvo una cámara a
mano, el objetivo no era otro que el mundo del toro. Es sabido que la Fiesta de
los Toros es un vivero inagotable de posibilidades de hacer fotografías únicas
y diferentes, porque casi todo surge espontáneo. Poco hay preparado. Y allá por
esos ruedos de Dios, Salvador daba rienda suelta a su imaginación y diferentes
puntos de vista.
Con el paso del tiempo el abrazo de la
fotografía lo fue envolviendo y con un grupo de colegas, en el año 1980, funda
y preside la Agrupación Fotográfica Ubriqueña y hasta aquí ha sido su
presidente y referente. Igualmente fue cofundador de la Federación Andaluza de
Fotografía.
Atesora cerca de medio centenar de premios
fotográficos y confiesa que le tiene un cariño y admiración especial a AFOCO,
del que recibió una distinción, por el bien hacer por la fotografía cordobesa y
andaluza. Y valora muy positivamente que hayan conseguido impulsar el Premio
Mezquita de Fotografía a nivel nacional e internacional con una categoría
tremenda.
Actualmente ya jubilado, Salvador pasa la
temporada taurina asistiendo a las actuaciones de los chavales de las Escuelas
Andaluzas en sus intervenciones por las diferentes plazas de nuestra Comunidad.
Con el charlamos brevemente sobre el
problema del coronavirus, que nos tiene confinados en casa, y su incisión en la
Fiesta de los Toros.
- Muy
mal, después de haber pasado la crisis económica anterior creo que será un
desastre económico muy difícil de superar.
-
Hemos visto atónitos, por inusual, como se han suspendido las ferias taurinas
más importantes ¿Que repercusión piensa tendrá en la economía de España?.
- En
el mundo del toro se calculan que trabajan alrededor de trescientas mil
personas que lo pasarán muy mal económicamente.
- Muy
mal cuando salgamos de esta pandemia, el aficionado tendrá tan maltrecha su
economía que no podrán asistir a los espectáculos taurinos en la proporción
necesaria para su mantenimiento. Y los que lo pasarán peor serán los ganaderos
que no aguantarán otra crisis.
- Si, pero no lo hará. Aunque ahora entiendo que hay otras prioridades.
-
Cree que esta crisis repercutirá en el futuro inmediato de la Fiesta de los
Toros?.
- Si
mucho. Es otro palo más a un espectáculo que lleva demasiado tiempo recibiéndolos.
- Ojalá, pero me temo que no. Tanto tiempo España con la persiana bajada y no creo que tanto daño a tantos sectores se pueda arreglar de golpe.
- Que
es lo primero que va a hacer cuando pueda salir a la calle?.
-
Visitar a mi Virgen de los Remedios a darle gracias y a la familia y amigos.
Tanto tiempo encerrado te hace reflexionar mucho y valorar todo de una manera
distinta. Ahora nos vamos a dar cuenta lo que vale un beso y un abrazo.
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