ENTREVISTA
"MI ARMA PRINCIPAL PARA LA FINAL
SERÁ EL TOREO DE MULETA. CON ELLA ME SIENTO CAPAZ DE TODO"
MANUEL QUINTANA ES FINALISTA DEL II
BOLSÍN TAURINO DONCELES, DE LUCENA
Ladislao Rodríguez Galán fotos : Ladis
Manuel Quintana Moyano, cordobés y alumno de la Escuela Taurina de Córdoba
disputara en la plaza de toros de Los Donceles de Lucena, la Gran Final del II
Bolsín Taurino Donceles. Para alcanzar esta final, que compartirá en el cartel
con Alex Mariscal, Antolín Jiménez, Manuel Casado y José Antonio Monesterio, ha
tenido que superar dos duras pruebas en las que se las ha tenido que ver con un
puñado de novilleros muy curtidos, pero Manuel ha sabido dejar patente su buen
toreo y pellizco ante las becerras.
Esta Gran Final tendrá lugar el próximo domingo día 27 a las
11,30 de la mañana en Lucena. Y para esa fecha, que puede ser su trampolín de
lanzamiento, el joven Quintana se está preparando a fondo y está previsto que
días antes toree varios novillos en el campo. Hay que ir con todas las
garantías porque la competencia será muy dura.
Me acerco a la plaza de Los Califas, donde se ejercita, para
charlar con él un rato y amablemente interrumpe el entrenamiento.
- Manuel enhorabuena
porque alcanzar la final se que ha sido una pelea tremenda ¿Como lo viviste
tú?.
- Lo viví con nervios porque no quería quedar mal yo ni dejar mal a
la Escuela que había confiado en mí. Fue muy difícil y complicado porque los
aspirantes éramos muchos y además venían muy bien preparados. Nunca pensé que
podía llegar.
- ¿Cual crees que fue
la clave para tu clasificación?.
- Además de las ganas que le puse, es que me aislé y me
concentré y nunca pensé que estaba compitiendo. Hice lo que sé hacer y puse en
práctica las enseñanzas que recibo de la Escuela y todo funcionó bien. Me
alegro por todos porque estar en la final ya lo considero un éxito.
- ¿Cuantos años llevas
en la Escuela Taurina de Córdoba?.
- Tengo dieciséis años y entré con catorce, así que en estos
dos años creo que he evolucionado porque me tomo muy en serio lo de ser torero.
Es una profesión muy difícil y complicada y cada día hay que avanzar.
- Y tu porque quieres ser torero ¿Te viene de familia?.
- En absoluto en mi familia no hay ningún torero, lo que pasa
es que desde que tengo uso de razón he ido a los toros con mi padre y mis
abuelos Juan Luis y Manuel. Viendo mi
afición y ganas de ser torero los tres me animaron para que me apuntara a la
Escuela.
- Y tu madre ¿Como se
lo tomó?.
- Lo pasa mal pero vino a verme a la semifinal y estará
nuevamente en la final en Lucena. En el fondo no le hace gracia que haya
decidido este camino pero se resigna porque sabe que lo vivo intensamente y es
mi pasión.
- ¿Cual será tu arma
principal para la lucha del día 27?.
- El toreo de muleta, con ella me siento capaz de todo. Con
la espada no estoy muy puesto porque todavía no he matado ningún novillo, pero
unos días antes lo haré en el campo. Confío que seré capaz de superar esta
prueba.
- ¿Donde diste tus
primeros pases a una becerra?.
- Fue en la finca de Doblas, en Hornachuelos, y después en la
finca de Juan Pedro Domecq. Ambos días me sentí muy a gusto y sobre todo capaz.
- La final será de
luces o de corto...
- De luces y será mi debut ante el público y con vestío de
luces.
Pues nada, allí nos veremos. Ojalá todo salga bien y te
traigas para casa el primer trofeo de tu
corta vida torera. Mucha suerte maestro.
LA CÁMARA ESTABA
ALLÍ
Tentadero en Juan Pedro Domecq (30-7-2020) donde Manuel
Quintana se enfrentó a una becerra por segunda vez. Quede constancia en este
rincón de la buena labor que desarrolló, con los pies asentados en la arena y sin dudar ante el animal en ningún
momento.
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