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BECERRADA HOMENAJE A LA AFICIÓN CORDOBESA

MANUEL QUINTANA Y LUIS  MONTERO SALEN A HOMBROS POR LA PUERTA DE LOS CALIFAS

Ladislao Rodríguez Galán                                       fotos: Ladis

Los Califas fue nuevamente escenario de la Becerrada homenaje a la afición de Córdoba (antigua Mujer Cordobesa), festejo que desde hace  más de una década viene organizando el Círculo Taurino de Córdoba, evitando así que desaparezca este clásico del mes de mayo.

 Con gran ambiente en los tendidos, se lidiaron ( en clase práctica) cinco añojos, muy bien presentados, bravos, nobles y de excelente juego, de la ganadería cordobesa El Capricho (Hnos. Centeno Guerra).

En el cartel: Ruiz de Velasco  (oreja,escuela taurina de Palencia), Martín Mendoza quedó inédito por lastimarse una pata el becerro al salir, escuela taurina de Granada) y Manuel Quintana dos orejas, Luis Montero dos orejas y Oscar Salcedo una oreja, los tres de la escuela taurina de Córdoba.

Montero y Salcedo debutaban ante el público.

Las cuadrillas guardaron un minuto de silencio en memoria del cirujano taurino Eliseo Morán, del director de la Escuela Taurina de Córdoba Rafael Blancas y de José Torres, profesor de dicha escuela.

RUIZ DE VELASCO

MANUEL QUINTANA

LUIS MONTERO 

OSCAR SALCEDO

Los chavales estuvieron auxiliados por los profesionales Nelson Villegas y Juan Antonio Carmona y los alumnos Javier Merino y José Antonio Cañero.

En esta edición de 2023,  se cumplen 127 años de la creación de la becerrada por parte de Rafael Guerra "Guerrita",  y es la primera vez que ha sido presidida  por una mujer, la aficionada Ana Segado Ochoa, que estuvo asesorada en el palco por el veterinario José Luis Prieto Garrido y el matador de toros Fernando Tortosa.

Igualmente se dio la circunstancia de que en los 58 años que tiene el coso de Los Califas, también fue la primera vez que una mujer preside un festejo taurino.

NOTAS AL MARGEN  

Lamentablemente el segundo animal se lastimó una mano al salir de toriles y hubo de ser devuelto. Como era una clase práctica no había obligación de tener un sobrero, por tanto el alumno de la Escuela Taurina de Granada Martín Mendoza quedó inédito. Este chico, natural de Motril, perteneciente a la Escuela de Granada desde enero de 2022,  iba a debutar en público pero se llevó el disgusto de su vida porque venía con una ilusión tremenda. Para que tengan una noción de como se desenvuelve en el campo les muestro unas imágenes que me ha facilitado su profesor El Loiro..

A Martín le deseo que el próximo día 7 de junio en la plaza de toros de Granada (donde debutará, por fin) tenga un rotundo triunfo. 

En esa becerrada alternará, junto a otros alumnos de Escuelas Andaluzas, con nuestro paisano  Manuel Quintana, uno de los triunfadores de esta tarde.

FELICITACIONES

En el capítulo de felicitaciones, la más sincera al Circulo Taurino de Córdoba en la persona de su presidente Alfonso Téllez que desde hace más de una década se está dejando la piel para que este festejo, más que centenario, pueda celebrarse año tras año. Una labor ardua ya que no reciben subvenciones de ninguna institución pública, todo el desembolso sale de las cuotas de los socios. Reciba el y su equipo nuestra más cerrada ovación.

 

Felicitación, igualmente, al palco de la becerrada compuesto por Ana Segado, como presidenta y los asesores José Luis Prieto (veterinario) y Fernando Tortosa (matador de toros, como asesor artístico). Los tres han marcado un hito histórico.

 

Y no podemos dejar de felicitar a la cordobesa banda de música del Cristo del Amor, que no ha parado en toda la tarde de amenizar las faenas de los chavales, llevando con sus notas la alegría a los tendidos.

 

Felicitación extensiva a la cantidad de gente joven que se ha dado cita en la plaza. Viendo la avalancha bueno sería replantearse la organización de las atractivas nocturnas. Siempre tuvieron éxito ¿Porqué no ahora?.

 

Y como nota curiosa decirles que el traje corto que usó Oscar Salcedo, estaba confeccionado por su abuelo el prestigioso sastre Joaquín Salcedo, y fue el que estrenó su padre, en los años noventa, en un festival en Priego de Córdoba. Y no lo han tenido que arreglar. Le venía al chico que ni pintado. 

LA CÁMARA ESTABA ALLÍ